El transporte marítimo permite trasladar el volumen más grande de mercancías a mayores distancias que cualquier otro medio de transporte. De hecho, el intercambio comercial internacional se realiza principalmente por este medio, ocupando el 90% del comercio mundial.
La industria del transporte marítimo es crucial para mantener un nivel suficiente de importación y exportación de mercancías. Sin ella, el sustento de la economía moderna sería imposible. Durante el último siglo, la industria experimentó una tendencia general creciente en el volumen total del comercio.
La industrialización y la globalización trajeron consigo el libre comercio y la creciente demanda de productos de consumo. Gracias al desarrollo tecnológico, el transporte marítimo se ha convertido en un método eficiente y fiable de transporte de mercancías.
Se calcula que las operaciones marítimas totales se han cuadruplicado en las últimas cuatro décadas. Además, se calcula que esta cifra alcanzará los 300.000 millones de toneladas-millas en 2050.
La formación es indispensable para garantizar un sector competitivo
De acuerdo con datos de la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA), España es el país de la Unión Europea que lidera los certificados de especialización de la marina mercante en la Unión.
Por este motivo, desde el Grupo Forma-t, ofrecemos cursos homologados y certificados que se necesitan para poder trabajar de una manera eficiente en el sector marítimo. Cursos como:
- Formación Básica en Seguridad
- Avanzado en Lucha contra incendios
- Actualización de Formación Básica
- Actualización Avanzado en lucha contra incendios
- Buques de pasaje
- Formación Básica en Protección Marítima
Los países desarrollados han entendido el carácter esencial de la marina mercante para el crecimiento de sus estados, asimismo los problemas que se pueden originar en su economía, cuando el sector marítimo no opera eficientemente. Y como ejemplo de ello está el hecho de que EE.UU ha declarado a la Marina Mercante estratégica para su economía.
Estados Unidos, va a dejar de tener un papel pasivo en la industria marítima, para pasar directamente a la acción y a la pugna por el control, sobre todo, del sector contenedor.
EE.UU pretende resurgir marítimamente competitiva con todas estas medidas, porque ha entendido el potencial de las herramientas asociadas a la industria marítima y, por ello, pretende ponerlas en marcha con carácter de urgencia.
Además, hay que comentar que España es el país europeo con el mayor potencial de crecimiento en economía azul. Según informa El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, en su intervención en los «Desayunos con el Clúster», organizados por el Clúster Marítimo Español (CME).
Asimismo, aseveró que: “en buena medida, el futuro de lo que le pase a España pasa por la economía azul. Me gustaría trasladar un mensaje de decidida apuesta por el sector naval por parte de este Gobierno, y muestra de ello es la puesta en marcha del PERTE y avanzar en el desarrollo de la energía eólica marina».
Eólica para impulsar la marina mercante
Al igual que se reconoce la importancia de la Marina Mercante como puntal de las economías de los países, también es justo reconocer el volumen de contaminación que provoca: el 13,5% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero que se producen en la UE.
En el sector ya hay movimientos para paliar esas emisiones. Hay quien opta por apostar por el hidrógeno o los buques eléctricos y quien busca nuevas opciones para sacar mayor partido del que históricamente ha sido el gran aliado del tráfico marino: el viento, ya sea volviendo a los viejos veleros o con nueva tecnología que ayude a aprovechar al máximo su impulso.
Ejemplo de ello son los esfuerzos en investigación e inversión que se están produciendo en el sector naval para construir buques impulsados por energías limpias.
Hace tan solo unos días, el Shofu Maru atracaba en el puerto de Newcastle, en Australia. Es el primer buque granelero impulsado por la energía eólica. Si resulta tan especial es sin embargo por la tecnología que incorpora para respaldar su movimiento: el sistema Wind Challenger, una vela rígida telescópica capaz de sacar partido de las rachas. El sistema —precisa Offshore Energy— permite que los mercantes logren reducir de forma significativa el consumo de combustible y emitan alrededor de un 5 u 8% menos de gases de efecto invernadero.
Otra de las propuestas que se tiene sobre la mesa es la de aprovechar las velas de rotor (rotor sail). Éstas podrían aportar un extra también aprovechando el impulso del viento y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero.
Conclusión
Aunque hablar de barcos y viento parezca una obviedad, hoy día, esa relación histórica cobra aún más importancia se cabe. Propulsar los enormes buques de la Marina Mercante con la fuerza de la energía eólica hará que en un futuro el mundo esté menos contaminado y las economías mundiales puedan soportar mejor los vaivenes de los precios de los carburantes.
Por eso, desde Grupo Forma-t, te animamos a formarte con nuestros cursos GWO en el sector eólico y recordarte, que en este año, te animamos a que te formes también en los cursos anteriormente citados, los de Marina Mercante; ya que son los dos sectores con más futuro laboral.